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ICAL La Federación de Asociaciones de Personas Sordas de Castilla y León (Fapscl), a través de su presidente, Luis Miguel Jiménez, solicitó hoy en Valladolid, en el marco de los actos conmemorativos del Día Internacional del colectivo, una mayor sensibilidad y eliminación de barreras de comunicación para unas 14.000 personas afectadas por esta discapacidad en la Comunidad. “Se trata de reconocer la heterogeneidad de la comunidad sorda, junto a su accesibilidad completa y necesidades en igualdad de condiciones que el resto de la población, en todo tipo de ámbitos sociales”, concretó.
Fapscl logró reunir hoy en Valladolid en torno a unas 300 personas que forma parte de una amplia mayoría de personas sordas asociadas en diez agrupaciones repartidas por Valladolid -con dos- junto a Burgos, Aranda de Duero, León, Ponferrada, Ávila, Palencia, Salamanca y Zamora. Las provincias de Soria, sin asociación, son atendidas por integrantes de la Aranda que de desplazan cuando es necesario.
Jiménez citó algunas de las necesidades de la comunidad sorda, haciendo especial hincapié en las del ámbito artístico, “ya que es preciso poder acceder a la cultura, donde quizás existen más limitaciones y deben corregirse a través de más intérpretes y profesionales, ya que ahora la ratio es de un sordo por cada uno de ellos y no es suficiente”. A su vez reclamó que en todos los servicios e instalaciones públicos exista mayor accesibilidad con servicios de interpretación y videointerpretación en lenguaje de signos, con calidad y gratuitos.
El presidente de Fapscl añadió que, pese a que los efectos de la crisis económica aún son papables, se ha podido avanzar en algunos aspectos en Castilla y León con el apoyo de la Gerencia de Servicios Sociales de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades. “Se nos da un apoyo completo mediante una subvención y con ello podemos dinamizar algunos servicios. Pero en el caso de algunas personas sordas en situación de desempleo tenemos que seguir luchando, además de intentar lograr una mayor visibilidad del colectivo”, argumentó.
Emergencia y teleasistencia
Otras de las necesidades expuestas en el manifiesto que se leyó hoy en la plaza Mayor de Valladolid se centró en el derecho a contar con servicios de emergencia, teleasistencia y de atención adaptados a las características comunicativas de las personas sordas. A su vez se reclamó un atención temprana integral, que cuente con la lengua de signos para las niñas y los niños sordos; que no exista discriminación económica en el uso de ayudas técnicas o tecnológicas para la audición; programas de atención a familias de personas sordas que atienden todas sus necesidades; accesibilidad tanto en los propios centros educativos como en escuelas de idiomas o academias privadas; o el derecho a un empleo digno, también en empresas ordinarias, sin encasillamientos por ser personas sordas.
Tras la concentración matinal en la plaza Mayor vallisoletana, las cerca de 300 personas sordas de Castilla y León protagonizaron una manifestación de cerca de hora y media por el centro de la ciudad, que finalizó en la plaza de Juan de Austria, donde degustaron una paella en el interior de una carpa. Por la tarde, en el centro cívico sur se realizó la proyección ‘Historia del Día Internacional de Personas Sordas de Castilla y León’, seguida de una conferencia de María Jesús Serna, vicepresidenta segunda de la CNSE, bajo el título ‘Cultura Sorda. Patrimonio y Derecho’.