El joven de 22 años que fue trasladado al hospital Marqués de Valdecilla de Santander tras intentar quitarse la vida después de, presuntamente agredir a su expareja en Ponferrada ha fallecido en las últimas horas, según ha podido confirmar este periódico.
El hombre había inhalado gases del tubo de escape de su coche por un tubo conectado a la ventanilla del mismo y, tras ser atendido en un primer momento por los servicios de emergencias del 112 y trasladado al Hospital El Bierzo, posteriormente se decidió llevarlo al hospital de Santander especializado en estos casos y que cuenta con una cámara hiperbárica de recuperación. Sin embargo, en el centro cántabro no se pudo hacer nada por salvar su vida.
Espero que la chica se encuentre bien tras la agresión, pero qué pena y qué desgracia. Qué mal llevamos las frustraciones de la vida, qué mal gestionamos las emociones, qué mal asimilamos que nos digan NO. Qué desgracia para sus familiares.