PREMIOS MUJER 2024

Fallece el poeta Leopoldo María Panero

El poeta Leopoldo María Panero, incluido en el grupo de los 'novísimos', falleció ayer por la noche a los 65 años de edad en el Hospital Juan Carlos I de Las Palmas de Gran Canaria por un fallo multiorgánico, según confirmaron desde su editorial Huerga y Fierro a Ical. “Ha muerto de una forma dulce, en su cama”, indican.

V. Silván/ ICAL

El poeta Leopoldo María Panero, incluido en el grupo de los ‘novísimos’, falleció ayer por la noche a los 65 años de edad en el Hospital Juan Carlos I de Las Palmas de Gran Canaria por un fallo multiorgánico, según confirmaron desde su editorial Huerga y Fierro a Ical. “Ha muerto de una forma dulce, en su cama”, indican.

Panero falleció alrededor de las 23 horas y fue su doctor, Segundo Manchado, quien comunicó la noticia de su muerte a Antonio Huerga y Charo Fierro. “Tenía todos los achaques del mundo, pero a la vez no tenía ninguno, resistía, se acostó y cerró los ojos y así se lo encontraron al hacer la ronda en el hospital, muy tranquilo”, relatan.

El poeta llevaba un tiempo ingresado en el área de Psiquiatría del Hospital Juan Carlos I de Las Palmas, aunque estaba en régimen abierto. “Él entraba y salía cuando quería”, detallan desde la editorial, que lamentan su pérdida en su pérfil de Facebook: “Amigo Leopoldo María Panero, siempre has sido un extraordinario poeta, fiel y amigo de tus amigos. Allí donde estés que sepas que te echaremos de menos. Te queremos. Descansa en paz”.

El poeta Leopoldo María Panero nació en Madrid el 16 de junio de 1948 y se convirtió en uno de los máximos exponentes de la poesía transgresora. Miembro de una familia de escritores, acomodada e intelectual, sus orígenes le unen a la provincia leonesa como hijo de Leopoldo Panero, el gran poeta astorgano que formó parte de la Generación del 36 dentro de la corriente de la poesía arraigada de posguerra.

Panero se ganó pronto el calificativo de ‘poeta maldito’ con su paso por prisión a consecuencia de sus coqueteos con la izquierda radical y su militancia antifranquista, así como por sus primeras experiencias con las drogas, desde el alcohol a la heroína, en aquellos años jóvenes en los que estudiaba Filosofía y Letras en la Universidad Complutense de Madrid y Filología Francesa en la Universidad Central de Barcelona.

Un calificativo al que también contribuyó su delicada salud mental, que le llevó con apenas 20 años a ser ingresado por primera vez en un psiquiátrico, donde volvería muchas veces hasta ingresar de manera permanente a finales de los años 80 en el psiquiátrico de Mondragón, para diez años después trasladarse definitivamente por su propia voluntad a la unidad psiquiátrica de Las Palmas de Gran Canaria, donde falleció.

Estas reclusiones sin embargo no impidieron a Panero desarrollar una extensa y prolífica obra poética, aunque también se atrevió con la narrativa y el ensayo. Así, publicó por primera vez en 1968 con el poemario ‘Por el camino de Swan’, al que siguieron títulos como ‘Así se fundo Carnaby Street’, ‘Teoría’, ‘Last River Together’, ‘El que no ve’, ‘Contra España y otros poemas de no amor’, ‘Heroína y otros poemas’, ‘Poemas del manicomio de Mondragón’ o ‘Erección del labio sobre la página’, entre otros tantos.

Condolencias de la Diputación

Ante la pérdida del importante poeta Leopoldo María Panero Blanc, la Diputación de León quiere expresar su sentir y trasmitir sus condolencias a la familia y a todos los que le querían y admiraban su obra, así como a la ciudad de Astorga, a la que la familia Panero está vinculada.

Fue  el último de una saga familiar presidida por su padre el poeta astorgano Leopoldo Panero y su madre la escritora Felicidad Blanc. Su compleja trayectoria personal, llena de situaciones difíciles, alimentó su poesía bella y compleja, vinculada con el carácter arquetípico de autor maldito, aplicado al literato en numerosas ocasiones. Según muchos críticos y escritores su poesía se encuentra en uno de los más altos pedestales de la poesía española contemporánea.