Entre el humo y la fiesta

Son días estos de celebraciones patronales en la mitad de los municipios del Bierzo. De hecho, España entera se diría que anda de jarana. Al parón institucional de agosto le suceden las numerosas personas que toman sus días de descanso estival en estas fechas. Y en éstas, pudiera parecer que todo se encuentra quieto, tranquilo, pero ni mucho menos.

Nos ha caído como si del cielo se tratase, un borrador de Presupuestos Generales en los que, salvo correcciones en Congreso y Senado, todo parece indicar que seguirán las inversiones públicas que podemos llamar “de mantenimiento”. Poco hay para los proyectos importantes pendientes desde hace lustros para esta tierra. Esperamos con ansiedad una política en materia energética que frene de una vez por todas la sangría del sector minero del carbón y disipe las dudas; ambiguedades como las que se viven en las dos centrales térmicas de la zona. Aunque, sabemos, Anllares tiene fecha de caducidad. Sin embargo, no sería baladí pensar que Cubillos, central que sí tiene muchas de sus inversiones modernas realizadas, puede ser vendida a alguien que crea más en ella que los actuales propietarios italianos. Sin duda, un tercio de la vida, directa o indirectamente, depende de estas cuestiones.

Y mientras tanto las autovías a Orense, a Asturias o el rescate de la autopista a León siguen durmiendo el sueño de los justos con partidas pequeñas o meras intenciones futuras con fecha abierta. Los empresarios, otra pata del banco que sostiene el sistema, siguen divididos en repúblicas independientes de sus casas, ahora con un nuevo protagonista más: las pequeñas y medianas empresas del Bierzo, PYME Bierzo o algo similar, escisión del CEL, a su vez escisión de la FELE. Seguimos incrementando los chiringuitos casi unipersonales. Club Financiero, ATA, Cámara de Comercio,  Templarium-Cebra… La nueva presidenta del IMFE, Rosa Luna, más bien debería hacer como Jesucristo y echar a cintazos a todo aquel que ocupa injustamente el Vivero ponferradino de empresas, así como liderar una obligatoria federación de organizaciones de empresarios y emprendedores bercianos. Y a ser posible, con dinamiteros amigos de la goma2 excluidos…No nos valen esos falsos líderes como ejemplos de conducta y empredendores a seguir.

Contamos todavía con un Gobierno central en mayoría absoluta, con un Gobierno regional de seriedad contrastada, una Diputación más garante si cabe del municipalismo, así como unos recién estrenados gobiernos locales ilusionados y que nos tienen que ilusionar.

Y si nos deja el humo de los malditos fuegos que los indeseables provocan, esperemos que cuando termine la fiesta y volvamos a la realidad, lo veamos todo más claro y nos enfrentemos con verdadera honestidad a un futuro lleno de claroscuros. El Bierzo lo merece y sus habitantes…más.