PREMIOS MUJER 2024

Emprendedoras bercianas en el Antiguo Régimen

Fueron pocas pero consiguieron abrirse camino en un mundo de hombres, utilizando en ocasiones los resquicios de las mismas leyes que las ponían límites. Un artículo de investigación de Ana Gª. Merayo saca a la luz la historia de varias mujeres que rompieron moldes con sus negocios

El desconocido rol de la mujer en el Antiguo Régimen toma forma en el Bierzo gracias un artículo de investigación publicado por la doctora en Derecho Civil Histórico Ana Gª. Merayo en el último número de la Revista del Instituto de Estudios Bercianos. ‘Luces y sombras de la visibilidad social de la mujer del territorio del Bierzo durante el Antiguo Régimen -finales del siglo XVI a finales del XVII-‘ es “una aproximación revisionista construida a pie de archivo histórico”, según la autora, que aglutina varios ejemplos de mujeres que se movieron en un mundo de hombres, rompiendo moldes, y en muchos casos “utilizando en su beneficio los resquicios de las leyes antiguas, que posibilitaban renunciar a los límites que éstas mismas les imponían”, explica Ana Gª. Merayo en su texto.

Más allá del empoderamiento de las mujeres de estirpe noble, que también recoge el artículo, y sin quitar mérito al papel jugado por estas féminas preparadas y hábiles, la autora ha dado con varios casos de auténticas emprendedoras, fundamentalmente en el comercio, pertenecientes al pueblo llano.

Una mayordoma con plenos poderes en San Pedro Castañedo

Así, en San Pedro Castañedo, la investigación ha detectado la excepcional presencia de una mujer, Marina Rodríguez Freixo, ocupando, en 1767, el cargo de mayordoma de la Cofradía de la Virgen del Rosario, un cargo “público y representativo”, que se renovaba anualmente. Quien lo ostentaba, contaba con atribuciones de tesorería, cobranza y “poder de obligarse en actos jurídicos patrimoniales”. Rodríguez Freixo era viuda y tenía, 70 años de edad, cuando ocupó este puesto.

Una mercería adjudicada al mejor postor

La investigación, legajo a legajo, también ha dado con la adjudicación, mediante “un procedimiento abierto al mejor postor”, de un “Encabezamiento de Alcabala de mercería y paño” en favor de Magdalena de la Plaza, fechado en 1695 en Ponferrada. Según la correspondiente escritura, la mujer recibió la explotación de la mercería por dos años a cambio del pago de 300 reales de vellón al Marqués de Villafranca.

Licencia para franelar y ‘beatillar‘ el paño en Bembibre

Unos años antes y en esta ocasión en Bembibre, otra mujer, Marta Toribia, era hallada, previo examen, “hábil y suficiente”, por lo que recibía licencia para “franelar en lienzos y estopas y beatillar en todo género de paño, teniendo tienda pública y oficiales y aprendices en toda esta jurisdicción, sin que incurra en pena alguna”.

Una mujer capaz de levantar la ruina familiar

Desde una perspectiva diferente pero haciendo gala de esas extrañas virtudes que caracterizaron los exiguos ejemplos de mujeres en el Bierzo -según Merayo- el estudio recoge el “ilustrativo” testamento de María González, fechado en 1695 en la España de Carlos II. María González, ponferradina, casada, “hidalga  o no” -El Bierzo contaba con una alta proporción de hidalguía en esa época-, consigue trasmitir una impresión de persona adelantada a su tiempo en su testamento:

“Item, digo que soy cofrade de once Cofradías de esta Villa y por no me acordar cuales son, no las declaro, remitome a las cartas de pago que de sus entradas tengo en mi casa, suplico a sus Mayordomos, me asistan con la cera, como es costumbre”

“Partiendo de una casa arruinada, recibida en herencia, exhibe satisfecha un patrimonio consolidado, reconociendo sin ambages que para prosperar tuvo que endeudarse a razón de veinticuatro ducados anuales. (…) María González estaba casada pero, a juzgar por su expresión, si en ese matrimonio mandaba una persona, esa no era el varón”, señala la autora de la investigación que ha conseguido reconstruir su historia.

“La suma de indicios puede resultar todavía escasa para permitir la revalorización del rol de la mujer en el Antiguo Régimen, pero no es anodina, sino sufientemente solvente como para que se imponga el reconocimiento de excepcionalidades pioneras y que se abran caminos de investigación novedosos a este respecto”, añade Ana Gª Merayo.

Fuente y artículo completo: ‘Luces y sombras de la visibilidad social de la mujer del territorio del Bierzo durante el Antiguo Régimen -Finales del S. XVI a finales del S. XVIII-. Autora: Ana Gª Merayo, Dra. en Derecho Civil Histórico. Estudios Bercianos nº 40. Mayo 2017. Revista del Instituto de Estudios Bercianos.