El Instituto Gil y Carrasco, 144 años de historia

EBD El Instituto de Estudios Bercianos ha presentado este jueves el libro del autor Miguel José García González, más conocido como Jota, que narra la historia del Instituto Gil y Carrasco. A lo largo de los 16 años que lleva en el centro, Jota ha ido recopilando información para dar vida a lo que hoy es este libro, “El Instituto Gil y Carrasco. 144 años al servicio de Ponferrada y el Bierzo”. “Cuando llegué empecé a hacer la revista del centro, una serie de capítulos cada año uno sobre lo que iba encontrando al hacer otros estudios de otras cosas pero sobre todo en el Ayuntamiento y me di cuenta que aquí hay una riqueza enorme. Entonces decidí, en unos 15 años, me recopilo todo y hago un libro”, aseguraba el autor.

A pesar de que comenzó a funcionar como instituto en 1870, su relación con la educación se remonta a 1663, puesto que el centro era un convento agustino desamortizado en el que había una cátedra donde se daban clases de secundaria, siendo un instituto de referencia ya no solo en el Bierzo, sino de parte del noroeste de España.

Pero además de instituto, el Gil y Carrasco ha sido un teatro en el siglo XIX y también fue un cine. Su nombre, por el contrario, según relató Jota, se le puso en el año 1933, aunque ni en la República ni durante la Guerra Civil gustaba mucho. “Bien entrados los años 40 ó 50, después de la Guerra, fue el Instituto Nacional de Ponferrada y no les gustaban los nombres, a no ser que fuera de algún personaje del régimen. La gente si que le llamaba Gil pero costó y fue en el año 33 cuando se aprobó el nombre”, aseguraba el autor de “El Instituto Gil y Carrasco, 144 años al servicio de Ponferrada y el Bierzo”.

Jota señaló que el Gil y Carrasco, que fue el Ayuntamiento de Ponferrada el que lo construyó, siempre ha estado muy unido a la ciudad y a sus habitantes, que lucharon tanto en la República como en la Guerra Civil porque no se cerrara. “Es una de las pocas instituciones que consigue el beneplácito de todo el mundo, incluso en la República en los momentos peores, más problemáticos, de más follones, la gente se une toda para defender el instituto cuando lo van a cerrar. y cuando la Guerra lo mismo, lo quieren cerrar porque aquí se monta un hospital, muchas cosas, y pretenden cerrarlo y aquí se une todo el mundo, van a ver a los ministros, a Madrid, a Burgos al Gobierno de Franco para que se abra el instituto otra vez y se consigue que no se cierre”, afirmó.

El centro comenzó con menos de un centenar de alumnos y en la actualidad hay una media de 1200 ó 1300. En el mismo han estudiado el general Queipo de Llano; Zurita, que es el primer piloto español que rompió la barrera del silencio; el pintor Primitivo Álvarez Armesto o Luis del Olmo, entre otros.