Las lluvias han vuelto a la comarca del Bierzo tras una breve tregua y con su regreso los ríos siguen causando problemas. Sobre todo el Boeza, que está desbordado en diferentes zonas y mantiene inundadas las instalaciones deportivas del Barco en Bembibre.
Situación que se incrementa en Villaverde de los Cestos, dentro del municipio de Castropodame, donde el río Boeza anega las carreteras, edificaciones y zonas próximas a varias viviendas, llegando a cortar el acceso a la localidad desde la Nacional VI. Hasta donde se desplazaron técnicos de la Diputación de León para cortar la carretera sobre las 13:00 horas de este viernes.
Una escena parecida es la que ofrece el río Tremor, que ha crecido de forma muy intensa hasta amenazar diferentes tramos viarios con posibles inundaciones que se podrían producir si sigue lloviendo. En concreto en uno de los puentes de Torre del Bierzo, donde el cauce del río está cerca de anegar la calzada.
El resto de ríos aguantan las crecidas
Por su parte, el Sil ya sobrepasa el nivel de prealerta en Matarrosa, con un nivel superior a los 3 metros cuando hace tan solo unos días no superaba el metro. A su paso por Ponferrada los datos son menos alarmantes, ya que el Sil conserva su altura habitual por debajo de los 15 centímetros y un caudal cercano a los 3,5 metros cúbicos por segundo. Eso sí, con la excepción de Toral de Merayo, donde este jueves las inundaciones cortaron el acceso a la localidad.
En el resto del Bierzo se repiten estos problemas, el Cúa en Quilos mantiene un nivel alto de alerta según señala la CHMS, mientras el Burbia y el Sil en Requejo y Matarrosa está en prealerta.