El año electoral se notó en el acto institucional del Día del Bierzo

Discursos y actitudes muy políticas, se dieron cita en el acto institucional en el Día del Bierzo celebrado en el Ayuntamiento de Ponferrada. En los prolegómenos ya se notaba además del ambiente festivo, una nutrida representación política. Procuradores, alcaldes, concejales, diputados, senadores además de los seis principales, a saber, el presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán, que marcó el hito histórico de ser el primero en la historia que visita el Día de la Encina; la alcaldesa de Bembibre, Silvia Cao, como municipio oferente en el año en curso; el presidente del Consejo Comarcal, Gerardo Álvarez Courel, el presidente de la Diputación de León y alcalde de Camponaraya, Eduardo Morán, el consejero de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez Quiñones, la delegada del Gobierno de España en la Comunidad, Virginia Barcones y el propio alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón. La Delegada de la Junta, Esther Muñoz, el subdelegado del Gobierno, Faustino Fernández…

Entre saludos, casi anuales, se notó la presencia de Luis Tudanca, secretario general del PSCyL, que aprovechó la ocasión para recordar el nefasto verano en materia de incendios y recordó las carencias y acusaciones en contra de la gestión de la Junta al respecto. El consejero aludido, Suárez Quiñones, se defendió con agilidad. Pero la desgracia natural ha quedado patente en el discurso previo a los medios.

Se ha podido confirmar que Eduardo Morán repetirá como aspirante a la alcaldía de Camponaraya y quizás a la Diputación. Gerardo Álvarez Courel ha dejado entrever en su alocución que le gustaría seguir de presidente del Consejo Comarcal. En el PP, hay una defensa cerrada al consejero de Fomento, al que todos veladamente le “pasan” las críticas en materia del fuego. El presidente provincial del PP, al igual que el secretario general del PSOE, apoyan en Ponferrada a Marco Morala y a Olegario Ramón, aunque serán comités electorales superiores quienes decidan.

Muy reivindicativo el presidente del Consejo Comarcal, recordó, cómo no, la necesidad de una sede propia, las carencias más perentorias de la comarca en todas las materias y los esfuerzos para coger fuerza y presencia real en la gestión pública berciana. Eduardo Morán, desde la Diputación lanzaba mensajes de realizaciones y muchos proyectos a punto de culminar, carreteras, internet, regadíos…pero pronto pasó al ataque reinvindicativo especialmente a la Junta. El consejero de Medio Ambiente defendió a todo el Gobierno y al papel de la Junta, en su estilo, repasó con citas y números actuaciones regionales en la zona. La más política, apelando al corazón y a la unidad institucional y de los distintos partidos, fue Virginia Barcones, la Delegada del Gobierno la que más habló de unidad, ilusión y resilencia para las gentes que habitan el Bierzo. El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, aprovechó para poner encima de la mesa el discurso feminista y de la llamada memoria histórica. Muy ideológico en su retórica.

Como un clamor unánime y para quien corresponda en cada institución, quedó claro que el Bierzo necesita la unión ferroviaria con León, la autovía a Orense, la mejora de la A6, una sede para su institución comarcal con mayores competencias mancomunadas, inversión en regadíos, aplicar la lógica en Las Médulas, en el Ponfeblino, no dejar como está sucediendo el desmantelamiento silencioso de sus servicios sanitarios y hospitalarios y una llamada de SOS tras el fin de la minería y las muchas industrias derivadas.

Los cohetes estallaban a las afueras del palacio municipal y el gentío esperaba el inicio de los actos religiosos. La política se paraba, pero por un rato, porque muchas comidas de grupo e institucionales por separado estaban previstas en el Día del Bierzo, una jornada que además de la fiesta de la Patrona, el día comienza con un repaso, un rendir cuentas a la ciudadanía y aprovechar, quizás con ese saludo fugaz, el concertar una cita o símplemente verse las caras al menos una vez al año de forma pacífica en torno a la Encina.

El editor