La Diputación de León ha otorgado durante el primer semestre de este año cerca de 300 ayudas de urgencia social, que benefician a 203 leoneses o familias leonesas, lo que supone que ya se han repartido 170.000 euros. Así lo han explicado en la mañana de este viernes el vicepresidente primero de la institución provincial, Francisco Castañón, y el diputado de Servicios Sociales, José Miguel Nieto, quienes han recordado que “el objetivo que nos hemos marcado es evitar que la falta de recursos, de ingresos, por las circunstancias que sean, aboque a cualquier familia leonesa a estar en situación de exclusión social”.
Las ayudas de urgencia social tratan de cubrir las diferentes necesidades básicas que tengan las familias, las personas que vivan solas o las víctimas de violencia de género, en definitiva, con los leoneses que más lo necesitan. De estas ayudas concedidas, 100, es decir el 30%, por un importe total de 45.000 euros, se han destinado a cubrir los gastos de electricidad y calefacción que tienen las familias que se encuentran, según los informes del CEAS, en riesgo de lo que se llama pobreza energética.
Otras 63 ayudas, con un gasto de 44.000 euros, se han destinado al pago de alojamiento. Este gasto, considerado una necesidad básica de subsistencia, se produce en aquellos casos donde la persona o la familia se forzada a abandonar su alojamiento habitual así como para ayudar a mantenerse en el alojamiento habitual. En este tipo de ayudas se enmarcan también las mujeres víctimas de violencia de género o familias desestructuradas, entre otras.
La Diputación también ha concedido, de enero a junio, 41 ayudas por importe de 11.340 euros para la manutención y los gastos de vestido e higiene en familias y personas que no disponen de recursos para ello. Incluso, las ayudas de urgencia social también permiten en abono de hipotecas para evitar la pérdida de su vivienda habitual con 14 ayudas concedidas por un importe de 12.550 euros.
Otras 14 ayudas, por importe de 14.000 euros, se han destinado para cuidados de salud, esencialmente para gafas, audífonos y para la realización de tratamientos odontológicos y prótesis bucodentales imprescindibles, siempre con el adecuado estudio médico.
La Diputación destina 1 de cada 4 euros del presupuesto a gasto social que tiene, como destinatario, a las personas que habitan en los municipios menores de 20.000 habitantes de la provincia. “Pero existen personas y familias con unos problemas más acuciantes, que no pueden cubrir sus necesidades básicas de subsistencia, problemas derivados de la falta de recursos, algo que hemos visto con demasiada frecuencia durante la crisis, que están en serio riesgo de exclusión social”, según explicó Francisco Castañón, quien añadió que “son, en casos como esos, donde las administraciones tenemos y estamos actuando”.
El presupuesto de la Diputación, dentro del convenio marco que tenemos con la Junta de Castilla y León, dispone para 2016 de una partida de 300.000 euros denominada ayudas de urgencia social. “Pero esta cuantía es un mero número porque, como ya anunció el presidente durante la presentación del presupuesto, se destinarán todos los recursos que sean necesarios para que todos los leoneses que lo necesiten dispongan de las ayudas, por lo que se trata de una partida abierta”.