La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, avanzó este miércoles que la Comisión Europea estudiará el caso de la minería en Castilla y León, tras su reunión con representantes de la institución en Bruselas; y adoptará “rápido” una decisión sobre la legalidad del céntimo verde, que permitiría hacer competitiva esta actividad.
Del Olmo, que estuvo acompañada por todos los integrantes de la Mesa del Carbón, se reunió también con responsables de la Comisaría de Empleo de la UE, para conocer los requisitos de las ayudas europeas a la globalización, que beneficiarían a los trabajadores que dejen su empleo en el sector minero, así como a los jóvenes menores de 29 años que ni estudian ni trabajan. Del Olmo espera solicitar estos apoyos para formar a estas personas y reorientarlas a otras actividades alternativas en esos muncipios mineros, en quince días.
Pilar del Olmo, que conversó con la jefa de gabinete de la comisaria de Competencia, Ditte Juul-Joergensen, puso sobre la mesa la aplicación del céntimo verde, una medida de bonificación fiscal para que la minería sea más competitiva. “Bastante es que se vaya a estudiar y de forma rápida nuestra propuesta”, dijo.
Un planteamiento novedoso
La consejera de Hacienda destacó que este planteamiento es una novedad para Bruselas, que no había escuchado nunca la medida por parte del Gobierno español, con el que “mantiene una relación constante”. El compromiso, repitió Del Olmo, es estudiarlo en un plazo “relativamente breve” y si se aprueba, lo inmediato sería hablar con el gobierno que estuviera en ese momento, porque constituiría la medida “más efectiva” y de aplicación inmediata para un sector para el que constituiría “una tabla de salvación a la que agarrarse”.
El “céntimo verde”, aclaró, consiste en ofrecer bonificaciones fiscales de 13 euros por tonelada de carbón, que actualmente se vende a 65 euros, lo que permitiría que el carbón producido en Castilla y León pudiera ser “más competitivo”. Aseveró que esta medida permitiría que las centrales térmicas pudieran comprar el mineral nacional “sin ayudas”, porque es “de mayor calidad”.
La consejera insistió en que en caso de que pudiera implantarse, la ayuda “tendría carácter efectivo e inmediato, lo que supondría que la minería tendría algo con lo que salvarse”. La medida además favorecería que la centrales térmicas pudieran utilizar el carbón español que “es de mayor calidad” y “respetuoso con el medio ambiente”, en palabras de la consejera.
Decisión inamovible
Bruselas pidió ya en 2010 que las minas de carbón que no fueran competitivas debían desaparecer a partir de 2018, sin embargo, la Junta de Castilla y León espera que al intentar promover la competitividad de las minas de la Comunidad pueda aún salvarse el sector. “La decisión es que las minas no competitivas cierren en 2018 y esa decisión es inamovible hoy por hoy, pero el céntimo verde podría hacerlas más competitivas”, resumió.
Con todo, Del Olmo indicó que desde esta Comisaría de la Competencia de la UE están en “continuo contacto” con el Gobierno en funciones que, al parecer, les ha presentado “varias alternativas para sacar adelante el sector de la minería, que no nos han explicado”, dijo. “No las conocemos y les hemos puestos sobre la mesa esta alternativa nueva que estudiarán y verán si es compatible con los tratados y normativa en el sentido que no sea considerada ayuda de Estado”, apostilló.
Arancel
La consejera reconoció que durante el encuentro con Competencia, se les planteó también, aunque “no con tanta fuerza”, la posibilidad establecer un arancel al carbón de importación, pero asumió que esa opción “encarecería la energía eléctrica de todos los países”. En este sentido, remarcó que ese carbón “no se produce con los mismo requisitos ambientales, laborales y administrativos que el carbón autóctono”.
La consejera defendió la continuidad de este sector en la Comunidad y trasladó a la responsable de la UE la situación de las comarcas mineras, que han sufrido una pérdida “importantísima” de casi el 85 por ciento del empleo en los últimos diez años. Aclaró la consejera que la población de ese territorio vive en casi 9.000 kilómetros cuadrados, lo que supone una densidad de 12 habitantes por kilómetro cuadrado, con unos ciudadanos por lo general mayores. “Es un zona en la que debemos luchar con los agentes sociales y los municipios para revitalizala y que no se pierda esa actividad”, enfatizó.
Globalización
En cuanto a las ayudas a la globalización, la consejería deberá ahora preparar un documento en el que se recojan los criterios exigidos por Bruselas para solicitar estos apoyos. Los fondos europeos podrían destinarse a personas que actualmente están sin empleo, a jóvenes menores de 29 años, pero también para que los mineros puedan trabajar en distintos sectores. La subvención europea podría cubrir el 60 por ciento del presupuesto y el resto se debería cofianciar con fondos públicos y/o privados.
Ayudas paliativas
El secretario general de CCOO, Ángel Hernández, que ha acompañado a Pilar del Olmo, considera que las ayudas abordadas hoy son “paliativas” para orientar a los trabajadores hacia nuevas actividades. No obstante, ha recordado que la postura de CCOO es “mantener abierto el sector de la minería”, para que “siga siendo rentable y teniendo un valor”. La postura de Bruselas hasta ahora siempre ha sido reducir el peso de la minería como fuente de energía en Europa. Sin embargo, Hernández ha lamentado que “una cosa es tener menor peso y otra es que su total desaparición”.