¿Una catedral en Ponferrada? ¿Yoda comiendo botillo? ¿Darth Vader luchando con templarios? ¡La Inteligencia Artificial lo hace posible!

Las redes sociales viven las últimas semanas una invasión de imágenes o grupos de (nueve) imágenes cada cual más curiosa. Es la moda en torno a Dall-e mini, una aplicación web que genera mediante inteligencia artificial una propuesta pictórica según las sugerencias del usuario.

El funcionamiento es muy simple: basta con introducir una palabra o frase y Dall-e (se pronuncia Dalí, como el genio del surrealismo) se encargará de, en unos instantes, generar automáticamente una muestra visual de esa idea que hemos propuesto. El fondo del asunto… es algo más complejo.

Se trata de un sistema de inteligencia artificial que basándose en lo que una búsqueda de esas palabras hace aparecer en internet, combina esos conceptos para que la nueva imagen responda a lo que pedimos. Si ponemos “manzana”, hará aparecer una manzana (que no es una copia de una imagen previa, sino que se ha generado ahora). Si buscamos por “El Bierzo”, nos proporcionará unas idílicas y bucólicas estampas; la búsqueda de “Ponferrada” hará aparecer el Castillo de los Templarios; etcétera.

La aplicación, hay que tenerlo en cuenta, es global por lo que las referencias tirando a locales dificultan obtener los resultados deseados. Por ejemplo, si buscamos “Prada A Tope” nos va a aparecer una colección de bolsos.

También acepta búsquedas mediante frases complejas. La resultante vendrá compuesta en base a cómo interpreta las relaciones existentes entre los elementos de la misma, aunque sea una propuesta de fantasía. Es decir: si escribimos “perro hablando por teléfono en Marte”, aunque esa imagen no exista como sí, lo hacen (por su cuenta) cada uno de los elementos que la componen. El algoritmo de Dall-e está instruido con estas dotes de epistemología para poder asombrar a los usuarios que se acercan a él con resultados, si bien no siempre espléndidos, en la mayoría de las ocasiones acertados.

Aunque algo no existiera antes, Dall-e puede diseñarlo. Por ejemplo, se le puede proponer que nos dibuje una catedral para Ponferrada o una imagen de Yoda, el personaje de La Guerra de las Galaxias, comiendo botillo o recolectando cerezas. También puede servirnos para imaginar cómo sería algún soldado romano que vigilaba la explotación aurífera de Las Médulas, el aspecto del Morredero si tuviera nieve y, por supuesto, hemos aportado nuestro granito de arena sobre cómo debería ser la futura sede del Consejo Comarcal del Bierzo.

La aplicación está siendo usada para generar imágenes muy cómicas. La imaginación de cada cual pone los límites.

Otro uso que se les está dando es el de recurrir a esta aplicación para hacer aparecer, como si de un filtro se tratase, una imagen conocida. Así, se pueden conseguir que lo que quiera que pensemos se nos muestre al estilo de tal o cual pintor, de una u otra época, o como si estuviera siendo grabado por una cámara de seguridad o dentro de la estética de un videojuego.

La genial creación sirve de entretenimiento a una con ser vehículo para la reflexión. En el fondo, Dall-e busca patrones en los pie de foto de las imágenes que hay en internet por lo que sus creaciones van a ser reflejo, tal y como señalan sus creadores, de los prejuicios con los que esas imágenes fueron definidas por quienes las subieron a la red (y teniendo la primacía anglosajona en estas lides, esto se multiplica).

Por tanto, aunque la búsqueda de referencias conocidas nos da a entender qué piensa la inteligencia artificial de nosotros, en el fondo también nos muestra lo que como época estamos dejando como testimonio de nuestra interpretación del mundo.