Cuesta abajo hacia el abismo

Decimos bien, ‘cuesta abajo hacia el abismo’, pues un equipo que lleva 10 jornadas sin conocer la victoria, perdiendo en su estadio de El Toralín ante el Alavés, Tenerife, Mallorca y Córdoba, y empate frente al Alcorcón, a así como derrotas en Lugo, Girona y Elche, y cosechando dos empates en Albacete y Valladolid, es un pobre bagaje para un equipo que llegó a estar en el tercer puesto de la tabla, pero que ahora tras estos resultados se encuentra mirando para abajo, en lugar de para arriba.

A esto se une el hecho de estar sin marcar un gol siete jornadas, pues sólo lo hicieron en Albacete en la jornada 19, donde marcaron por partida doble, obra de Djordjevic y Berrocal, y el del sábado ante el Córdoba, logrado por David Caiado, dice mucho del mal momento que está atravesando el equipo blanquiazul, de ahí que el nuevo entrenador, Fabri, que tomaría buena nota de lo que han hecho sus jugadores en el partido frente al Córdoba, tratará   a partir de esta semana de corregir esos defectos que observó en los jugadores que tiene a su disposición hasta el término de la temporada.

Perder ante el Córdoba entra dentro de lo normal, pues se trata de un equipo que está en puestos de fase de ascenso y firme aspirante a subir a Primera División, pero cuando son tantas las derrotas seguidas duele mucho más, máxime cuando la afición estuvo de diez desde el pitido inicial, incluso en los momentos más difíciles, es decir, a raíz del 0-2, demostrando y reconociendo lo mucho que el equipo blanquiazul se jugaba en este encuentro.

Queda mucha liga y por lo tanto muchos puntos en juego, pero para eso hay que volver a la dinámica de juego y resultados que estaba llevando el equipo hasta la jornada número 16, jornada esta donde se ganó al Atlético Osasuna por un contundente 3-0, goles marcados por Acorán, Álvaro Antón y Yuri, y que estaba el equipo en la sexta posición de la tabla. A partir de ahí es cuando el equipo comenzó a caer en barrena.

Para colmo lo que le queda por delante ahora no es nada fácil, pues este sábado jugarán en San Mamés frente al Bilbao Athletic, colista del grupo con 18 puntos, diez menos que la Ponferradina, pero que dada su situación pretenderá ponérselo muy difícil a la Deportiva. Tras este encuentro visitará El Toralín el Numancia, para una jornada después viajar a Tarragona para medirse al Nástic. Tras el Nástic llegará al Toralín el Huesca, partido este donde no se puede fallar al ser un rival directo, y una semana después visitará el Carlos Tartiere para medirse al Real Oviedo, tercer clasificado en estos momentos.

Lo mejor para la Ponferradina es que los resultados que se dieron en la jornada favorecieron al cuadro blanquiazul, como los empates del Huesca en Elche, dado que de ganar el Huesca adelantaría en la tabla a la Deportiva, el del Albacete en el Carlos Belmonte ante el Mirandés, que sigue haciendo que los de Castilla – La Mancha sigan marcando el último puesto del descenso, el del Almería en Mendizorroza frente el líder Alavés, y el del Mallorca frente al Nástic de Tarragona en el Iberostar Estadio. Estos resultados conllevan que la Deportiva siga en el puesto 16 de la tabla, eso sí, ahora a tan sólo dos puntos, no tres, como la pasada jornada de los puestos de descenso.