Así se eligen los representantes del Consejo Comarcal del Bierzo

Este domingo, se celebran elecciones municipales, en las que 101.579 personas están llamadas a votar en el Bierzo para elegir un total de 336 concejales. Pero no solo: con los resultados de estas votaciones, también serán electos los nuevos consejeros comarcales, o al menos la asignación de estos a cada partido. Esta se hace de forma indirecta, según los resultados obtenidos en las municipales. El mecanismo es similar para la Diputación. En el caso del Consejo Comarcal, son 27 los escaños a repartir entre las distintas formaciones concurrentes a estos comicios.

Estos 27 consejeros se reparten por zonas geográficas. En total, hay seis de estas circunscripciones. Llevan por nombre Ancares-Sil, Bierzo Alto, Bierzo Central, Cabrera-Suroeste, Bierzo Oeste y Ponferrada. Solo la última, la de la capital, engloba un único municipio. Las otras contienen entre seis y ocho municipios. El número de consejeros que se elije en cada zona es determinado por la Junta Electoral Provincial. Lo hace de manera proporcional, teniendo en cuenta el número de residentes en cada área. Pero esto se hace cumpliendo algunas normas.

Estas son, en primer lugar, que cada zona tendrá como mínimo un consejero que elegir. Además, ninguna puede superar como asignación un tercio del total. Para todo ajuste y redondeo que se deba hacer, se observará la media de habitantes por consejero.

Como se ve, Ponferrada, que aglutina prácticamente la mitad de la población del Bierzo, solo elige un tercio de los consejeros, pues tal es el límite que la Ley de la Comarca establece, que si bien puede distorsionar la expresión de la voluntad general, al sobrerrepresentar a los territorios pequeños, es defendido por muchos como instrumento de cohesión.

Cómo se elige el Consejo Comarcal del BIerzo

Una vez se conoce la composición de los Ayuntamientos de la comarca, se inicia el cálculo del reparto de los consejeros en cada zona. Se utiliza el llamado sistema D’Hondt, que en verdad es un sistema de generación de listas ordenadas a partir de listas ordenadas pero que en España es que se usa generalmente para los repartos de escaños políticos.

El sistema D’Hondt funciona generando una serie de cocientes numéricos para cada partido. En la zona Ancares-Sil, por ejemplo, que reparte cuatro consejeros, cada partido tendrá cuatro cocientes. Estos son el resultado obtenido en votos dividido por 1, 2, 3 y 4, respectivamente.

Una vez se creado una tabla con los cocientes de cada uno de los partidos, se seleccionan los más altos. Si hay, como decíamos, que repartir cuatro escaños, estos corresponderán a los cuatro números mayores que encontremos en esa tabla. En este artículo sobre el reparto de procuradores en la provincia de León en unas autonómicas hay un ejemplo gráfico de cómo funciona el sistema D’Hondt, a veces vulgarmente llamado “ley”.

El reparto se hará en base al voto obtenido por cada candidatura y por dicho método. Entran a este reparto todos aquellos partidos que cumplan dos condiciones: haber obtenido al menos un concejal en la zona geográfica del reparto y, al menos, el cinco por ciento del voto válido (es decir, del voto emitido a candidaturas y el voto en blanco). Esta segunda condición (o “barrera de entrada”) hace —y esto es algo que suele pasar inadvertido— que el voto en blanco en unas elecciones, al elevar el monto total de voto válido y, consecuentemente, el número de sufragios necesarios para llegar al 5 por ciento y entrar en el reparto, aleja de este a los partidos pequeños.

A partir del próximo domingo, el Consejo Comarcal conocerá los nombres de sus nuevos 27 miembros. Serán estos los que elijan mediante su voto en una asamblea plenaria al encargado de presidir la institución berciana. Los resultados de las municipales se conocerán primero y tras ellos, podremos conocer qué partidos han obtenido algún concejal y el 5 por ciento en cada una de las seis zonas.

Entonces, se podrá desvelar la composición por partidos del próximo pleno del Consejo Comarcal del Bierzo.