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Los secretarios generales de CCOO y UGT en Castilla y León, Ángel Hernández y Faustino Temprano, advirtieron de que si se deja caer la minería del carbón, lo siguiente será la desaparición de las centrales eléctricas vinculadas a la extracción en estas zonas y la pérdida de todo el tejido empresarial asentado en torno a estas actividades, lo que condenará económicamente a las cuencas.
Temprano aseguró en ‘Los Desayunos de Ical’, que a la desaparición total de la minería del carbón, seguirá la de las eléctricas de la zona y las empresas vinculadas, y Hernández expuso que si las centrales “no queman carbón español, seguramente no les interese seguir ahí, y se trasladarán a la costa” donde llega el mineral foráneo, mucho más barato.
Con todo, Faustino Temprano afirmó que la minería “tiene solución” aunque “cada vez es más difícil” a consecuencia de las decisiones políticas que no quieren que se solvente su situación, lo que queda reflejado en que apenas ya hay 100 mineros activos en las cuencas. “El carbón tiene futuro pero hay que apostar por él”, dijo, para constatar que no se puede esperar a la conformación de un nuevo gobierno para garantizar el futuro de este sector.
Ángel Hernández indicó, en su caso, que el tema “está complicado” y arremetió contra la política “absolutamente hipócrita” de la UE, que frena el carbón nacional por constituir una fuente contaminante, pero se sigue quemando mineral foráneo para generar energía, porque es “mucho más barato”.
El responsable de CCOO asumió que el carbón constituye “una fuente a extinguir”, pero requiere una transición y es preciso buscar un periodo de salida, aunque la situación no es “halagüeña”, dijo, en Europa, ni por las políticas adoptadas por el Gobierno de Marinao Rajoy en su conjunto, “no individualizando en el ministro Soria”.
En este sentido, el responsable sindical defendió que es preciso que Castilla y León busque un frente común con el resto de autonomías afectadas, como Asturias y Aragón, para que se defina en España el papel que debe jugar el sector dentro del mercado energético nacional. “Intentaremos buscar cuál es el papel del sector en ese proceso de transición y cuántas toneladas hay que sacar para quemar por las eléctricas”, agregó, para defender que se complemente ese programa con políticas asistenciales para la reestructuración.
“Chorradas, las justas”
Por lo que se refiere al nuevo programa de inversiones en las cuencas, que se está pactando dentro de las mesas del Diálogo Social, tanto Hernández como Temprano rechazaron el “café para todos” y advirtieron de que “el dinero tiene que ir a generar actividad económica”.
Temprano afirmó que están avanzando en el diseño de las inversiones con el reto de mantener población generando actividad empresarial, eso si, desde el principio de “no tirar el dinero como con los fondos Miner que no han servido para nada”.
Hernández insistió en que las partidas que se diseñan deben servir para atraer nuevas empresas y generar actividad industrial, y rechazó más partidas para “bachear carreteras” o proyectos turísticos de “iluminados” a los que no acude nadie. “Chorradas las justas”, sentenció.