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Comisiones Obreras exigió este lunes a los gobiernos autonómicos de Castilla y León, Galicia y Asturias la ratificación de una declaración “contundente” sobre la importancia para el futuro del Noroeste español de que este ramal se incluya en el conocido Corredor Atlántico, que unirá Lisboa con Estrasburgo y que servirá para vertebrar el oeste español desde la frontera portuguesa hasta Irún.
El secretario autonómico de CCOO en Castilla y León, Vicente Andrés, conminó a los tres ejecutivos y al Gobierno central, en declaraciones a Ical, a una “cumbre social y económica para hacer esta declaración”, de forma “urgente”, en el ámbito de la Macrorregión europea. En ella, pidió que estén presentes las organizaciones sindicales representativas y empresariales para poner en común todo lo relativo a necesidades en materia de infraestructuras y planificación estratégica de futuro.
Esta declaración ya ha sido consensuada por CCOO de las tres comunidades durante un encuentro celebrado en Ponferrada, al que asistieron, además de Andrés, sus homólogos en Asturias, José Manuel Zapico, y Galicia, Ramón Sarmiento.
Esta “cumbre” que solicita el sindicato serviría también para “confirmar el grado del compromiso de la cofinanciación”, ya que esta planificación de la Red Transeuropea de Transporte de Ferrocarril conlleva la implicación presupuestaria de estos tres gobiernos”. “Estamos contentos de que se haya incluido este ramal finalmente en el eje, pero queremos que lo ratifiquen”, aseveró el líder regional de CCOO, quien, por ejemplo, consideró que en Castilla y León “sería importantísimo si se llevar a cabo el centro de Torneros, en León”. La propuesta será trasladada en las próximas horas a los gabinetes de los tres gobiernos.
Desde CCOO ven positivas las declaraciones públicas, “más o menos grandilocuentes”, de las Administraciones al respecto, pero reclamaron la “inmediata presentación de proyectos concretos de ampliación y mejora de la red ferroviaria del cuadrante noroccidental y de la construcción y puesta en marcha de las correspondientes instalaciones logísticas que proporcionen los servicios auxiliares a este nuevo modelo de transporte”.
En este sentido, el sindicato exigió la finalización de las obras de la variante ferroviaria de Pajares en el año 2020 y su puesta en servicio en el 2021. También, la “necesaria” adecuación del tramo Pola de Lena-Gijón a los requerimientos de interoperabilidad para mejorar los tiempos de recorrido en el itinerario Madrid-Asturias, no sólo en el transporte de viajeros, también en mercancías, que permita la conexión del puerto nodal de Gijón con la Meseta norte.
Vicente Andrés aplaudió que la Comisión Europea ya haya recogido esta demanda y el plan incluya este ramal, Palencia-León-Asturias-Galicia, que conecta Europa y América y viceversa. No obstante, aún falta la sanción del Parlamento Europeo. En síntesis, esta inclusión “acerca la industria y los servicios de la Comunidad a la gran red del transporte de mercancías”. “Es decir, que lo que producimos pueda estar dentro de Europa de la misma forma que quien produce en Madrid, que era uno de los problemas de costes logísticos para quien se quería establecer aquí”, defendió Andrés.
Principio de cohesión
En su declaración, CCOO parte de que la puesta en marcha de los nueve corredores europeos (el Atlántico y el Mediterráneo transitan por suelo español) que se efectuará bajo la supervisión y coordinación europea “conformará un nuevo modelo de red caracterizada por formar un entramado en el que se priorizan la intermodalidad, la eficiencia económica y la sostenibilidad ambiental”. “La red global, por fin, ha de servir de garante del principio de cohesión territorial y social, permitiendo el acceso a todas las regiones de la Unión Europea”, reza el comunicado.
La Comisión recoge específicamente lo que se denomina ‘otras secciones’ anexas a la red básica. Se refiere a las conexiones con Galicia y Asturias, al tramo Valencia-Bilbao (que recibe el nombre de corredor cantábrico-mediterráneo) y Madrid-Valencia (Atlántico-Mediterráneo). De este modo, en España, la configuración final de la red quedaría determinada por una malla con cinco corredores multimodales conectados entre sí y con algunos tramos compartidos.
La aprobación definitiva y la ratificación por el Consejo de Ministros y por el Parlamento Europeo se debe efectuar en el plazo de un año, a partir del 5 de junio de 2018, antes de la disolución del Parlamento Europeo. Esta aprobación, sin embargo, “no garantiza su inclusión en la fase final” del Marco Financiero Plurianual 2021-2027 (Conecta Europa). Por ello, CCOO de Galicia, Asturias y Castilla León consideraron “imprescindible su inclusión y aprobación definitiva, ya que, al contrario quedarían aislados y fuera de estas redes de carácter europeo”.
A su juicio, el sistema ferroviario actual de la región noroeste, tanto en infraestructuras como en capacidades y prestación de servicio, se corresponde con un proyecto “del siglo XIX que se culminó con dificultades a lo largo del siglo XX”. “Este retraso histórico carece de una actualización relevante y es el elemento central de la manifiesta ineficiencia del ferrocarril de hoy”, critican con dureza.
La mayor parte de las mercancías y pasajeros de la región son transportados por otros medios y es especialmente grave en el caso de las mercancías, pues sus tráficos tradicionales han sido desplazados casi en su totalidad al transporte por carretera. En la actualidad, “existe un desequilibrio modal muy notable en beneficio del transporte de mercancías por carretera”. Aproximadamente, el 50 por ciento del tráfico de mercancías entre la Península Ibérica y Europa transcurre por la fachada atlántica, pero sólo el uno por ciento del mismo se realiza por ferrocarril y el 16 por mar. Así, el 83 por ciento es absorbido por carretera, “ lo que provoca la conocida saturación de las infraestructuras viarias”.
Para Galicia, Asturias y Castilla León “es necesario comenzar por establecer como inexcusable la presencia del ferrocarril en su sistema de transportes, dadas sus características específicas, como es el volumen de mercancías y pasajeros transportable por unidad operativa, su limitada incidencia ambiental en comparación con otros medios de transporte, incluyendo la fase de construcción o dotación de infraestructuras”. También, su “adaptabilidad a los mapas urbanos e industriales y el hecho de que el ferrocarril es la única modalidad de transporte terrestre que posibilita la conexión con el naval y carretero, mediante la integración más eficiente de puertos y terminales logísticas, amplificando de una forma notable la eficiencia del conjunto”.
CCOO apeló a la “necesaria conexión y coordinación” del Corredor Atlántico de Ferrocarril y el desarrollo de Autopistas del Mar para que “configuren para su desarrollo una alianza estratégica entre las instituciones y la sociedad”. “Resulta necesario evitar la inexistencia de relaciones institucionales entre los puertos, Renfe y ADIF; también evitar la rigidez de los convenios existentes y superar la dicotomía existente entre unas instituciones bastante ajenas a la problemática actual y de futuro”, señala la declaración