¡Gracias de todo corazón!

Esta mañana, la peor de nuestras pesadillas se hizo realidad: mi abuela ha aparecido sin vida. Jamás imaginamos que de la noche a la mañana (literalmente) nos fuéramos a ver envueltos en una situación tan triste, agónica y desesperante. Tenemos el alma rota, pero por lo menos, sabemos que ya tenemos dónde ir a llorarla.

Quiero agradecer desde lo más sincero y profundo del alma, en nombre de toda mi familia y, por supuesto, en el mío, todo el esfuerzo, el sacrificio, la constancia, las ganas y la humanidad que nos habéis transmitido en estos cuatro días. Cuatro días de los peores de nuestras vidas.

Gracias y mil veces gracias al equipo de Guardia Civil, Policía Nacional, Seprona, Geas, Protección Civil, Ayuntamiento de Camponaraya, Ayuntamiento de Carracedelo, El Bierzo Digital, Infobierzo, Diario de León… Vuestra profesionalidad ha sido fundamental para que la búsqueda haya sido de todo menos una pérdida de tiempo y de esperanza. Cada uno aportásteis vuestros conocimientos, y todo ello ha hecho la mitad del cometido. Gracias.

Infinitas gracias a todos los amigos, vecinos, conocidos, desconocidos, a los que fueron a curiosear pero al final se quedaron a ayudar. Gracias a los que buscaron a mi abuela como si fuese la suya propia. Gracias a quienes, incluso, hicieron batidas por su cuenta porque tenían ganas de aliviar nuestro dolor de una vez por todas. Gracias a quienes dejaron de lado sus dolencias y quehaceres por arrimar el hombro cuando más lo hemos necesitado.

Gracias por demostrarnos que aún existe la humanidad. Por demostrarnos que lo más básico y bonito, como lo es la empatía, aún prevalece por encima de todo.

Gracias de parte de mi abuela. Porque estoy segura de que estaría agradecidísima de ver cómo tanta gente a la que no conocía se unió para encontrarla.

Gracias por ayudar a que fuera posible el poder recuperarla para, por lo menos, tener donde ir a visitarla, a llorarla.

¡Gracias de todo corazón! Vuestra ayuda ha sido imprescindible.

Carta abierta de la nieta de la vecina de Camponaraya desaparecida el pasado jueves