Como cada año, los camioneros bercianos celebraron este sábado la festividad de su patrón, San Cristóbal, engalanando sus vehículos y haciendo una ruta que finalizó en el monasterio de Vega de Espinareda, donde tuvo lugar la bendición de los camiones.
Una cena de confraternidad sirvió para poner el broche a una jornada festiva para los transportistas de la comarca.