Caja Rural de Zamora consiguió en 2020 un beneficio después de impuestos de 24,7 millones de euros, un 1,7 por ciento menos que el obtenido en el ejercicio de 2019. “Nuestra entidad mantiene una alta rentabilidad en un escenario económico especialmente difícil, con un descenso del beneficio de tan solo el 1,7 por ciento respecto al dato registrado en el año anterior. Esta rentabilidad se apoya en la recurrencia de los ingresos, el control de costes y la calidad de nuestra cartera de inversión y de nuestros activos”, según destacó el director general de la cooperativa de crédito, Cipriano García.
“En 2020, las sólidas bases de la estrategia de negocio han permitido mantener nuestros beneficios, pese a la paralización económica, causada por la COVID-19, y el margen de negocio ha registrado un alza del margen de intereses del 4,5 por ciento”, añadió.
Cipriano García hizo estas valoraciones en el Centro Social de Caja Rural de Zamora durante la presentación del balance y la cuenta de resultados del ejercicio de 2020. “Los resultados corroboran una trayectoria dilatada en el tiempo de forma de hacer y de ser de una entidad eminentemente zamorana. El año fue muy complejo, marcado por la pandemia. Tenemos una obligación moral de aportar financiación a las empresas y familias y nos hemos volcado. Hemos consolidado de nuevo un modelo de banca distinta, local, con cercanía a las personas y a las empresas”, expuso.
Asimismo, destacó que la forma de hacer banca de la entidad se ha acreditado este año de forma clara, pues Caja Rural de Zamora es la entidad financiera local por excelencia gracias a la fidelidad de la sociedad zamorana, además de la de las zonas de expansión. “Crecemos en solvencia y somos capaces de atender las necesidades financieras de más empresas y familias, algo que solo se consigue desde el rigor y el esfuerzo”, anotó.
El volumen de negocio de la Caja alcanzó los 4.350 millones de euros, 644 más que en 2020, lo que supuso un aumento del 18 por ciento el pasado ejercicio y, prácticamente, doblar el conseguido en 2019, cuando se incrementó un 9,8.
Asimismo, detalló que en estos momentos de dificultad, las empresas han necesitado constantemente liquidez para el sostenimiento razonable de los negocios y el crédito nuevo ha supuesto incrementar sobre la concesión de 2019 un 33,1 por ciento, hasta llegar a formalizar 859 millones de euros, frente a los 645 de 2019.
“Es la prueba indudable de nuestro poyo al tejido productivo en los momentos más complejos de la economía. La inversión crediticia ha aumentado un 19,8 por ciento, frente a una tasa del 13,1 por ciento en 2019, cuando teníamos 1.440 millones de euros en créditos. Hemos pasado a 1.725, con un aumento final de 285”, precisó.
De esta forma, “toda la liquidez al tejido productivo aportada en la vía de créditos en la provincia fue de Caja Rural”, mientras que el resto de entidades “registró un descenso interanual del dos por ciento, una evidencia de cuál es nuestro compromiso con la provincia”.
La concesión de hipotecas “confirma el peso predominante” de la Caja en el sistema financiero de la provincia, al conceder el 70,8 por ciento de los saldos de nuevas operaciones hipotecarias en 2020. “Cada vez hay menos entidades financieras. Se van concentrando y entendemos que esta concentración bancaria debilita las facilidades de los clientes en el servicio bancario. Seguimos con nuestras oficinas abiertas constantemente y, en momentos tan difíciles, la Caja está con la provincia, apoyando todos los proyectos para sostener a empresas y particulares”, anotó.
Los recursos gestionados por la Caja registraron un “fuerte incremento” del 16,7 por ciento, cifra “muy superior” a la registrada en 2019, cuando aumentaron un 7,7 por ciento. “Los depósitos dentro del balance crecen un 19,9 por ciento, frente al 6,9 de 2019, cuando tuvimos un saldo final en depósitos de acreedores de 2.250 millones, y al cierre de 2020, tenemos 2.625 millones, con un aumento final de 375 millones”, detalló. “Los recursos fuera de balance ya suman 424 millones de euros, un 16,1% de los recursos gestionados por la entidad”.
40,8 por ciento de cuota de mercado
“Somos la mayor entidad financiera de Zamora, lo que se manifiesta en nuestras cuotas de mercado, que son mayores cada año. Se han registrado importantes crecimientos en inversión y en recursos gestionados”, rubricó el director general, en referencia al hecho de que la inversión representaba a 30 de septiembre de 2020 el 40,8 por ciento del mercado, con un crecimiento del 2.6 por ciento en 2020, y a que la cuota de la cooperativa de crédito en depósitos bancarios asciende hasta el 28,9 por ciento, un 1,5 por ciento más en 2020.
“Son las mayores cuotas históricas de la Caja y representan un impulso importante de la sociedad zamorana, que se involucra cada vez más con nuestro proyecto”, dijo.
Los recursos propios de Caja Rural de Zamora alcanzaron los 256 millones de euros, “incluyendo las dotaciones adicionales de reservas”, lo que supone un aumento del 10,7 por ciento respecto al dato registrado a 31 de diciembre de 2019. “Nuestra ratio de solvencia se sitúa en el 17,2 por ciento, con un alza de un 0,4 por ciento sobre la solvencia registrada a 31 de diciembre de 2020, cifra en todo caso, muy superior al nivel mínimo exigido. Tenemos algo más del doble de los requerimientos del banco de España y mucho mayor que la media de las entidades financieras”, puntualizó. “Es un factor fundamental a la hora de ganar la confianza de nuestros clientes”.
Activos problemáticos
La Caja saneó de forma “muy importante” los “activos problemáticos”, de manera que l tasa de mora se situó en el 2,42 por ciento, con un descenso del 19,9 por ciento respecto al dato registrado en el ejercicio de 2019. “Es una tasa inferior en un 53 por ciento a la registrada por el sistema financiero que, a 30 de noviembre de 2020, la última referencia del Banco de España, es de un 4,44 por ciento. Además, los activos problemáticos tienen una cobertura del 67 por ciento”, anotó Cipriano García.
Por lo que se refiere a la ratio de eficiencia, se situó en el 44,3 por ciento, con un descenso del 1,2 por ciento respecto a 2019. “La ratio de eficiencia mide los gastos respecto a los beneficios y eso implica que este año hemos sido capaces de reducir ese porcentaje. Para ganar 100 euros, este año hemos gastado 44,3 euros. Hemos sido capaces de mejorar, aunque es la mejor ratio en el ámbito nacional, si no se tienen en cuenta las entidades locales. Nuestra ratio de eficiencia destaca año tras año”, valoró.
Caja Rural de Zamora, que cuenta con 242 cooperativas asociadas, cuenta con 52.000 socios y 146.000 clientes. “La base social aumento en 2020 en 2.131 nuevos socios -un 4,3 por ciento- y, en los últimos seis años, se han adherido a este proyecto 8.666 nuevos socios”, remarcó. “La red provincial de oficinas es la más importante y, cada vez, más porque el resto se va retirando. Tenemos 67 puntos de atención al cliente en Zamora, con una red tota de 98 puntos de atención” en León, Valladolid, Zamora y Orense.
La Caja cuenta con 299 personas empleadas y este año se ha incrementado el 3,1 por ciento y las mujeres “ya suponen el 46 por ciento” de la plantilla. “Hemos abierto todos los días todas las oficias en horario completo y también en los momentos más duros. Los empleados han dado el do de pecho. Suele olvidarse a las entidades financieras y quiero dar las gracias a todos los empleados que, con responsabilidad y con su riesgo, han acudido todos os días a trabajar”.
Caja Rural mantuvo su “compromiso” con el mundo agropecuario y “acredita su prevalencia” y su “vinculación con los agricultores y ganaderos” de la provincia, según se desprende de 5.209 solicitudes de PAC domiciliadas en la cooperativa de crédito, de un total de 9.568 presentadas en Zamora, lo que supone “más de la mitad de la provincia, un 52,44 por ciento”.
Cipriano García incidió en que Caja Rural de Zamora “invierte la mayor parte de los recursos captados, el 78,4 por ciento, para el desarrollo económico de nuestros territorios”, mientras que, en la provincia de Zamora, “el resto de entidades invierte menos de la mitad” de los recursos captados.