El director de comunicación de Caja Rural, Narciso Prieto, y la presidenta de Asprona Bierzo, Rosa Rodríguez, presentaron hoy el acuerdo de colaboración con el que la entidad bancaria aporta 8.000 euros para el despliegue del proyecto Saturno, la iniciativa que prevé abrir una red de centros de barrio en distintos puntos de la comarca. “Nosotros ponemos las ideas y ellos ponen su grano de arena para cambiar la vida de muchas personas”, resumió la presidenta de Asprona Bierzo, que valoró el apoyo “vital” de Caja Rural en el día a día de la entidad.
En la misma línea, el director general de Asprona Bierzo, Valentín Barrio, señaló que la colaboración con la entidad bancaria “va siempre mucho más allá”. “No es un interlocutor bancario al uso”, apuntó Barrio, que destacó el “valor humano” de Caja Rural como “primer socio real” en el despegue del proyecto Saturno durante la pandemia. “Para nosotros es muy natural trabajar con ellos”, recalcó.
Por su parte, Prieto subrayó que Caja Rural es “una entidad bancaria con alma y con espíritu, apegada al territorio y a las familias” y valoró la oportunidad de cooperar por tercer año consecutivo con esta iniciativa de Asprona en favor de la plena inclusión de las personas con discapacidad intelectual. “Es un ejemplo de que también se puede crecer en humanidad y valor social”, apuntó.
Cuatrovientos y zona alta
Tras la apertura de las instalaciones en el barrio de Flores del Sil, que funcionaron como “embrión” del resto de centros, Asprona Bierzo ya dispone de otros dos centros de barrio en la calle Tercio de Flandes y en el municipio de Torre del Bierzo, a los que se sumará otro centro en el barrio de Cuatrovientos. Al respecto, Barrio señaló que los recientes problemas de filtraciones retrasaron la apertura de este último centro y avanzó que “de marzo no puede pasar”.
Del mismo modo, detalló los problemas de la entidad para encontrar un local adecuado para el último de los centros previstos, en la zona alta de Ponferrada. Según señaló el director general, la inversión para adaptar estos locales a los criterios de accesibilidad resulta excesiva. Cabe recordar que cada uno de estos centros está diseñado para atender a un máximo de 30 personas, de acuerdo con un nuevo modelo más personalizado y más abierto a la comunidad.