Bierzo Aire Limpio denuncia “irregularidades” en la planta de reciclaje de baterías de El Bayo

La asociación ecologista Bierzo Aire Limpio ha publicado en su página web el documento con el que tiene previsto recurrir el proyecto Novolitio, un controvertido plan que se desarrollaría en el polígono de El Bayo y que, según la organización, incumple la normativa europea de emisiones industriales. En su recurso, la asociación destaca que el proyecto no se ajusta a lo que se ha presentado como “reutilización y reciclaje de baterías de litio”, sino que se limita a la clasificación de estas, sin poner en el mercado baterías reutilizables.

Uno de los principales argumentos de Bierzo Aire Limpio es la “inadecuada” tramitación de la autorización ambiental simplificada para el proyecto, que según su parecer debería haberse sometido a una evaluación ambiental ordinaria, tal como lo requiere la Ley 21/2013 de evaluación ambiental para iniciativas de esta magnitud. El recurso denuncia “irregularidades procedimentales, como la vulneración de plazos clave y la falta de respuesta a las alegaciones presentadas por los afectados, lo que atenta contra los derechos de participación pública en asuntos medioambientales”.

La asociación también subraya la ausencia de informes cruciales, como el del Servicio de Residuos y Suelos Contaminados (SRSC), encargado de evaluar las emisiones atmosféricas del proyecto, y critica la aprobación de la autorización sin esta información esencial. Además, recalca que Novolitio podría generar más de 10 toneladas de residuos peligrosos al año, lo que debería haber implicado un procedimiento de evaluación ambiental ordinaria, no simplificada.

Otro punto de preocupación es el impacto en la salud y el medio ambiente. Bierzo Aire Limpio advierte sobre el riesgo de emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COVs) y de olores que afectarían al entorno urbano, así como la omisión en el análisis de contaminantes como las partículas PM2,5, PM10 y las sustancias perfluoroalquiladas (PFAS), también conocidas como “contaminantes eternos”. La reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea del 25 de junio de 2024 establece que las autoridades deben tener en cuenta todas las sustancias nocivas reconocidas, incluso aquellas no evaluadas previamente en las autorizaciones iniciales.

El documento concluye apelando al Principio de Precaución y solicitando la retirada de la autorización ambiental hasta que se subsanen las deficiencias y el proyecto cumpla con las normativas europeas y nacionales en materia de seguridad ambiental y salud pública.