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El Lacturale Araski tumbó al Embutidos Pajariel Bembibre (67-55), que acusó el cansancio y la escasez de efectivos en plantilla en el tercer partido en apenas ocho días para el conjunto berciano.
Fue clave el fondo de armario de las locales, con diez jugadoras en la rotación, lo que permitió llegar a la fase decisiva mucho mejor en el aspecto físico. En el cuadro rojillo, todo lo contrario. Fran García, con solo siete jugadoras y sin Svitlica al 100%, tuvo que cargar de minutos a Stanacev, Banks y Edwards, que jugaron más de 35 minutos y llegaron con la gasolina justa al final.
Y es que durante los dos primeros cuartos, el cuadro rojillo mantuvo el pulso en el marcador, con ventajas tanto para las vascas como para las bercianas, que llegaron a marcharse al descanso con un punto de ventaja (33-34).
El paso por vestuarios no les sentó bien a las del Bierzo Alto, que perdieron la lucidez en ataque y no consiguieron mantenerse en el partido en defensa. Así, al último período se llegó con una ventaja de ocho puntos para las locales, un recién ascendido que se mostró como un serio candidato a luchar por colarse entre los mejores, sellando con comodidad su tercera victoria de la temporada.
En el Embutidos Pajariel Bembibre brillaron las de siempre. La dupla norteamericana formada por Brianna Banks, con 14 puntos, y Ariel Edwards, con 17, fue el principal sustento ofensivo del equipo rojillo, que echó de menos la aportación de la capitana, Rita Montenegro, que solo anotó tres puntos.
Por parte del equipo vasco la más acertadas fueron la jamaicana Gidden, un tormento constante para las bercianas tanto por su acierto de cara al aro como por su dominio de la pintura, capturando catorce rebotes.
La derrota impide al conjunto rojillo igualar el mejor inicio liguero de su historia, aunque con tres victorias y dos derrotas en los cinco primeros partidos de la Liga Femenina se mantiene en la zona de ‘playoff’.