El Ayuntamiento de Ponferrada prohibió este domingo el acceso a las piscinas climatizadas del complejo Lydia Valentín a los padres de los participantes en una competición infantil de socorrisi, amparándose en la protección de los derechos de imagen y el honor de otros usuarios de las instalaciones ajenos a la competición, así como en el riesgo de seguridad que implicaba el acceso a las gradas por desprendimientos causados por humedades.
Según explica el Consistorio en una nota, se habían recibido quejas previas de los usuarios de las piscinas que compartían las mismas con los competidores, ya que habían sido grabados sin su consentimiento. Además, añaden, “si se hubiera reservado toda la piscina en exclusiva para la competición, tampoco se podría grabar, ya que sería preciso un permiso por escrito de cada padre para no vulnerar los derechos de los menores”.
De este modo, ante la imposibilidad de poder controlar los dispositivos de grabación por parte del personal de las piscinas, “se decidió impedir el acceso a las instalaciones a todas las personas ajenas a la competición o a las actividades natatorias”.
Desde la Concejalía de Deportes que dirige Iván Castrillo han lamentado “las molestias causadas a los padres, así como que no se les hubiera informado previamente de esta circunstancia”, y piden disculpas a los afectados, aunque insisten en que “la decisión adoptada es la más aconsejable para evitar eventuales vulneraciones de derechos de los menores que participan en las pruebas y del resto de usuarios de las piscinas”.
Buenas noches, no se trataba de una competición de Natación, ya que no se celebraba aquí ninguna competición este fin de semana.
La competición era de socorrista.