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Comienza la segunda edición del Bachillerato de Investigación/Excelencia impartido por el instituto Gil y Carrasco de Ponferrada en colaboración con la Universidad de León con un incremento en el número de alumnos, con un total de 16 matriculados. Otros diez alumnos han pasado al segundo año con lo que 26 jovenes de la Comarca se educan dentro de este programa experimental.
La Universidad también ha reforzado su interés en la modalidad de bachillerato después de cosechar buenas impresiones en su primer año de aplicación y ha aumentado hasta 16 los docentes-investigadores del campus de Ponferrada que atenderán a los alumnos de Excelencia, el doble que en la edición pasada.
Las campos de estudio con los que los alumnos podrán contactar durante los proximos dos años se han ampliado, además de prácticas en Botánica, Zoología y Fisioterapia como el curso pasado, se ofertará Ecología, Topografía-Geomática, Física Aplicada para adaptarse a las distintas inquietudes de los estudiantes.
Diez de los trece alumnos que se matricularon el año pasado repiten y recibirán asesoramiento del profesorado de la ULE con el propósito de elaborar a lo largo del presente curso cinco proyectos de investigación, de los cuáles dos serán orientados a Botánica, dos a Zoología y uno a Geomática.
El director del IES Gil y Carrasco, Domingo Carrasco destacó que se trata de una enseñanza específica que sólo se imparte en este instituto en la comarca del Bierzo, aunque está abierto a los demás centros, y que aporta como “valor añadido” formación investigadora hacia el campo de la universidad con la colaboración de la ULE. Otras comunidades autónomas españolas han decidido centrar sus bachilleratos de excelencia bilingúistico, humanístico o artístico, pero castilla y León se ha centrado en profundizar en el conocimiento científico.
“El Campus de Ponferrada, con 19 años, ya es mayor de edad y en colaboración con los profesores del instituto Gil y Carrasco, que ya tiene 145 años. Auna el esfuerzo de dos institutciones muy arraigadas en la comarca para un servicio educativo diferente a medio camino entre la formación de bachillerato y con un matiz investigador para iniciar a estos alumnos en la investigación científica”, afirmó Carrasco.
El director del Instituto señaló el esfuerzo que tiene que realizar estos alumnos a mayores ya que cuentan con dos horas lectivas más a la semana, en total 32 horas, para realizar esas prácticas que en la mayoría de los casos son por las tardes. La delegada del rector de la Universidad de León (ULE), Ana María Vega, destacó la actitud de los estudiantes que mostraron durante el año pasado su compromiso, disposición y su actitud crítica, germen del talento investigador.