Vallejo Valda, en arresto domiciliario, regresa a la cárcel por usar un teléfono móvil que supuestamente escondía en una biblia

En la tarde de este lunes 14 de marzo se ha reiniciado el juicio contra Lucio Ángel Vallejo Balda, acusado de revelar documentos confidenciales del Vaticano, traicionando así la confianza del Papa. El juicio se reanuda con nuevos interrogatorios, siendo el ex ecónomo de Astorga el primero en declarar ante los jueces.  Junto a Vallejo están siendo juzgados  los periodistas italianos Gianluigi Nuzzi y Emiliano Fittipaldi, la exrelaciones públicas Francesca Chaouqui y el antiguo miembro de la Comisión Investigadora de los Organismos Económicos y Administrativos de la Santa Sede (Cosea) Nicola Maio.

Según ha explicó el portavoz oficial del Vaticano, Federico Lombardi, Vallejo Balda regresó a la celda de la Gendarmería en el Vaticano la semana pasada por mantener contactos con el exterior, un acto deliberadamente prohibido en los regímenes de arresto domiciliario. El sacerdote, según las declaraciones de Lombardi, se estaba comunicando con el exterior, algo que tenía prohibido, tal como recoge Il Corriere de la Sera.  La agencia Europa Press y varios medios, como El Economista y Tele 5, añaden que Vallejo Valda habría escondido el teléfono en una biblia.

Según un periodista español, y tal y como se publica el blog Infovaticana,  “Vallejo Balda  ha utilizado el teléfono para preparar su defensa de que la policía lo impidió. Y teme por su vida “.

Una vez que declare esta tarde, el sacerdote español regresará a su celda.

Por su parte, Francesca Inmaculata Chaouqui se ha presentado en la sala acompañada de dos guardaspaldas y dos maletas blindadas con documentos, entre ellos varias pruebas clínicas que alertan de que necesita reposo por un supuesto embarazo de riesgo.