EBD La Junta de Castilla y León ha activado hoy los protocolos de aislamiento y intervención asistencial, epidemiológicos y de protección de los profesionales sanitarios previstos frente al ébola y coordinados entre las comunidades autónomas españolas y el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, por la declaración de un caso en investigación por enfermedad del virus del ébola que está siendo atendido por el sistema de salud castellano y leonés.
Se trata de un paciente que está siendo trasladado al Hospital Universitario Río Hortega, en Valladolid, centro de referencia en Castilla y León, donde permanecerá ingresado y tratado en régimen de aislamiento a la espera de los resultados de las analíticas que se le van a realizar de forma inmediata.
Se trata de un misionero de 40 años de edad, con iniciales R. G.R., que regresó de Sierra Leona el pasado 11 de diciembre a Madrid, y a Castilla y León el 16, si bien, aunque se ha activado el protocolo no ha tenido contacto con casos sospechosos o confirmados de ébola, según señalaron fuentes solventes a la Agencia Ical. Se trata de un misionero no sanitario de la Orden de los Agustinos que participa en proyectos de agricultura y construcción, así como de colaboración con escuelas.
Ha sido durante el decimoctavo día de los 21 que componen el llamado ‘Período ventana’ de control epidemiológico, cuando el paciente ha manifestado febrícula y dolor de cabeza, sintomatología definida para la activación del protocolo frente al ébola, pero que también es compartida por otras enfermedades como, por ejemplo, la malaria. Desde su llegada, permanecía en contacto y controlado por los Servicios de Vigilancia Epidemiológica de la Junta de Castilla y León, con la catalogación de bajo riesgo.
El paciente, cuyo estado de salud es bueno, será atendido en la unidad de aislamiento especialmente habilitada en el centro asistencial vallisoletano, a la espera de los resultados de los análisis que se le han practicado para su remisión urgente a la Instituto de Salud Carlos III, en Madrid, centro establecido como referente nacional para su determinación.
A esas mismas instalaciones asistenciales también se está trasladando a dos familiares directos que han convivido con él mientras ha presentado la sintomatología que ha supuesto la declaración del caso en investigación.
Estas dos personas, que se mantienen asintomáticas, han sido declarados como casos de alto riesgo, situación que se mantendrá hasta disponer de las analíticas del paciente en investigación, por lo que se ha procedido a su ingreso en situación de aislamiento preventivo, siguiendo las intervenciones protocolizadas.
Ante esta situación epidemiológica, la Consejería de Sanidad ha reforzado las actuaciones protocolizadas previstas en todos los órdenes: aislamiento, intervención asistencial, vigilancia epidemiológica y de protección de los profesionales sanitarios.
La Junta de Castilla y León insiste en que el ébola es una enfermedad cuya transmisión no es aérea, ni por los alimentos ni por el agua, sino por contacto estrecho con fluidos de personas afectadas, lo que hace muy complicado un contagio a la población general en el ámbito autonómico, nacional y europeo.
Por ello, es necesario ahondar en la tranquilidad ante esta situación, ya que no hay ningún motivo de alarma social y, en este sentido, es importante destacar que la atención a este caso en investigación por enfermedad por virus del ébola está siguiendo en todo momento los protocolos creados ante una enfermedad que no es nueva y para la que tanto los profesionales sanitarios como el sistema de salud castellano y leonés disponen de la información, la formación y los medios adecuados.