7,1 millones perdidos ó el CIFP de Ponferrada que nunca existió

Hace tres años la Junta de Castilla y León, con un retraso de 10 años, decidió  hacer en Ponferrada un Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP en adelante), con un presupuesto de más de 7 millones de euros. En su camino se cruzó el ayuntamiento de Ponferrada del mismo signo político por entonces, que  fue “fagocitando” el planteamiento de la Junta hasta convertirlo en lo que es hoy: una oportunidad perdida para Ponferrada   y un ejemplo de fracaso de gestión.

El pasado 3  de junio,  FETE-UGT denunciaba ante los medios de comunicación a la junta de Castila y León por fraude y por dejación de responsabilidades en la construcción de este centro. Algunas  profesor@s  y periodistas nos preguntan dónde está  el fraude, y yo digo que en “vender” a los ciudadanos un centro que nunca existió.

Ni  existe,  porque el edificio construido  al lado del parque de bomberos es el Centro de Formación e Iniciativas de Desarrollo  Local,  promovido por la  corporación  del PP que gobernó el  ayuntamiento de Ponferrada  hasta 2013, para  “sus” necesidades  de formación.  Nunca se plantearon  un centro integrado.  El edificio construido se proyectó en el 2006 (véase la prensa del día 02/02/2006,  “Ponferrada contrata  el proyecto para un centro de formación y desarrollo”)  y en esa fecha la Junta de Castilla y León  no tenía ninguna intención de hacer un centro integrado en  Ponferrada.

En los planos de  construcción, el título del proyecto en poder del ayuntamiento dice: Centro de Formación e Iniciativas de Desarrollo Local en  Ponferrada (León). El panel informativo de la obra, que aún se puede ver, dice lo mismo. En ninguna parte se hace referencia a un centro integrado. Pero sí se ha estado vendiendo a “bombo y platillo”.

En el Bierzo  se hacía  urgente la creación de un Centro Integrado    porque la ley de las Cualificaciones y de la FP, que data de 2002, hace mandatarias a las administraciones  para certificar a los trabajadores sus competencias profesionales y  dispone de estos centros  para ello. Además el centro de referencia en el Bierzo de las familias profesionales industriales,  que es el   IESVE , se encuentra en una situación de congestión tal, que hace años se están  impartiendo clases en sótanos, y  en el sótano se encuentra lo que no se debería llamar gimnasio.

No hay en la provincia ningún instituto de secundaria sin gimnasio, y el mayor de la provincia, que es el  IESVE, no lo tiene. En el IESVE en la actualidad, no existe la posibilidad de construcción por estar agotada  la parcela y  el entorno totalmente urbanizado. Así las cosas, una solución aceptable era  el centro integrado de FP del sector industrial, que liberaría tanto talleres como aulas y permitiría solucionar los problemas anteriormente expuestos.

Y en este punto comienza la rocambolesca  historia  de cómo crear un centro integrado en Ponferrada, para comprenderlo hay saber algunas cosas:

-El procurador a Cortes  de Castilla y León por el PSOE, Pedro Nieto, el día  5  de febrero  del año 2008 presenta una proposición  no de ley relativa a un nuevo centro Específico de FP en el Bierzo que luego se transforme en Integrado, se llega a un consenso con  el  PP y se aprueba una propuesta de las cortes regionales a la Junta, instándola a la creación de un centro específico de FP en Ponferrada.

– La junta de Castilla y León  tiene un  edificio “tipo”, que viene “personalizando”  según la clase de centro, características del solar, especialidades, etc. (Véanse el integrado Nº 1 de León, el “Pico Frentes” de Soria y más.) Lo normal es que la Junta viniera a Ponferrada con su modelo, pero…

– El ayuntamiento de Ponferrada, y su órgano para la formación, el IMFE, deseaban  un centro municipal de formación  y en el año 2006 se presenta la ocasión y para “vender” el parque de la juventud, encarga el proyecto de un centro de iniciativas locales y vivero de empresas. De este proyecto, del que incluso se construye una maqueta y se anuncia una 1ª fase, no se vuelve a saber nada hasta el año 2008, año en que la junta aparece por Ponferrada pidiendo una parcela para construir un centro integrado. Ese año el alcalde de Ponferrada es diputado nacional,  con poder en las estructuras del partido, y sacando su proyecto del cajón del olvido, parece que no tuvo mucho problema en  convencer a la junta para llevar  adelante el contubernio político-económico-educativo que viene a continuación: Hacer con el presupuesto para el CIFP, el centro de formación e iniciativas locales del ayuntamiento. Se materializa  el acuerdo en forma de convenio  y  se firma el 22 de diciembre del 2008.

-La Junta de Castilla y León haciendo dejación de sus responsabilidades, entrega al ayuntamiento el diseño, el dinero y la ejecución  del proyecto y por supuesto la propiedad  del centro, hay que recordar que los ayuntamientos ni tan siquiera tienen representación  en el Consejo Social de estos centros, que es  su órgano de gobierno.  Materializan el acuerdo mediante un convenio  de colaboración en el que se estipula que la Junta  pondrá  4 millones de euros y el ayuntamiento 2,7 millones. El centro además de integrado, con las familias profesionales de Fabricación Mecánica, Electricidad-Electrónica, Instalación y Mantenimiento y la familia de nueva creación, Agua y Energía, sería centro de iniciativas locales y vivero de empresas del Ayuntamiento;  ya estaban los dos pájaros muertos del mismo tiro. ¡Genial!

Genial si no fuera porque el  edificio que el ayuntamiento construye como aulario para un centro integrado de 800 alumnos es el mismo que tenía previsto como centro de iniciativas locales, con una modificación consistente en crear dos volúmenes nuevos a nivel de la planta 1ª, volúmenes que se pueden apreciar en el edificio construido y que en ningún caso pueden absorber  el incremento  de alumnos  que aportaría el centro integrado.

Genial si no fuera porque hasta que no está terminado el aulario, entre marzo y abril del 2012, ni se llama,  ni se consulta al centro donde se imparten en la actualidad los ciclos formativos que allí se van a dar y lo que es más grave, de talleres en esa fecha no existía ni previsión ni planos. Es decir no ha habido un proyecto de centro, si no, primero se construye el edificio  del ayuntamiento y cuando está rematado se hace otro proyecto para “pegarlo” al edificio anterior. No es un proyecto integral en dos fases, no, es un proyecto encima del otro.

Genial si no fuera  porque   los ciudadanos de Ponferrada deberán pagar 2,7 millones de euros de sus impuestos para crear un tipo de centro de FP  que  en ningún caso a los ayuntamientos del resto de la región les ha costado  un  euro,  por ser competencia de la Junta de Castilla y León.  ¿Por qué a Ponferrada sí?

Genial  si no fuera porque la corporación del PP con una deuda municipal importante, incumplió las inversiones previstas en el convenio firmado y al acabarse los 4 millones de la Junta, la obra queda paralizada a la espera de mejores tiempos para completar los talleres necesarios.

A todo esto, entre el 2012 y el 2013 cambian tanto la corporación local del Ayuntamiento de Ponferrada como la Dirección General de FP de la Junta de castilla y León, que se encuentran con el regalo envenenado de una inversión de 4 millones que lleva año y pico deteriorándose, tipo aeropuerto de Castellón, y como no está muy bien visto por los ciudadanos, deciden  meter en el edificio lo que quepa, y con toda urgencia.

Pero como los ciclos previstos no disponen de los espacios  necesarios, se tira por la calle de en medio, las promesas se incumplen,  “donde dije digo, digo Diego”, y se decide, desde  Valladolid,  utilizar a  familias “fáciles  de trasladar” para justificarse  y mandan a las familias de Administrativo, Informática,  e imagen y sonido, solución que no resuelve  los problemas base planteados, y que sin necesidad, son utilizadas para justificar un edificio que no fue proyectado para nada, pero vale para cualquier cosa.

 Así,  ya hay Centro Integrado, pero no tendrá nada que ver con el anunciado desde el 2009. Lo que van ha abrir si la cadena de despropósitos no continúa y si caben tres familias profesionales, es un centro integrado del sector servicios, el prometido lo era de sector industrial. La funcionalidad parece que no importa, baste saber que la expresión que más he escuchado de los ilustres visitantes  al definir el centro es “bonito”.

-La patata caliente se le pasa ahora al profesorado de estas familias profesionales, que desde hoy mismo tienen que adaptarse al edificio, tendrán que hacer valer lo  que existe, cuando nadie pensó en esas familias profesionales al diseñarlo.  A día de hoy, el edificio del centro  que empieza a funcionar en septiembre, no ha sido entregado por la constructora al Ayuntamiento  y  no se puede tocar  nada.

 Alguna pregunta para acabar:

¿Por qué la Junta entrega el dinero del aulario y no lo construye, como en el resto de la región? Aunque luego firmase un convenio de colaboración para compartir su uso.

¿Por qué deja el proyecto al libre albedrío del ayuntamiento? ¿Por qué un convenio para dejarnos esta chapuza de  colaboración que nos va a privar de  un centro imprescindible en el futuro de  la comarca?

¿Por qué el aulario del centro integrado de FP Nº 1 de León se compone de más o menos la misma superficie construida, pero con cuatro plantas y el de Ponferrada planta baja y un parche en el primer nivel? Han costado lo mismo. Van a albergar los mismos alumnos y la diferencia está a la vista.

Y una petición a los señores de la junta de Castilla y León. ¡Cumplan con la palabra dada a los ciudadanos  del Bierzo!  Construyan lo que prometieron, aunque sea con 10 años de retraso.

 Fernando López. Delegado sindical de la FETE-UGT