José María González: “No interesa que se oiga la claridad, coherencia y compromiso de IU”

La campaña ha superado ya su ecuador, ¿qué valoración hace de cómo trascurre?

Estamos en una campaña absolutamente diferente a las anteriores y una campaña peligrosa porque de nuevo el poder económico en colaboración con el poder político de este país trabaja para que el discurso que hacemos algunas otras fuerzas políticas no llegue a los ciudadanos. Hablo de la gran potencia mediática de esta campaña vía medios de comunicación audiovisuales. Nosotros seguimos con nuestro plan de hacer pedagogía desde la cercanía, desde los actos, estar en la calle y reuniones con diferentes colectivos de esta Comunidad y de este país, que están sufriendo los recortes económicos, sociales y en libertades por parte del Partido Popular.

¿Se siente IU desplazada en esta campaña ante los dos partidos emergentes que parecen concentrar el foco?

Se pone el foco en ellos no porque sean emergentes, sino porque se está jugando desde el campo de la política hacia la centralidad de la derecha económica: ni más, ni menos; y porque IU-Unidad Popular tiene una alternativa política y económica absolutamente diferente a la de ellos. No se está obviando a IU porque de repente haya dos fuerzas novedosas, aunque postmodernas, sino porque no les interesa que la claridad, coherencia y compromiso de nuestro discurso se oíga.

¿Cuáles son las expectativas de IU-Unidad Popular en Castilla y León?

Seríamos absolutamente utópicos si dijeramos que trabajamos para obtener varios diputados en el Congreso y Senadores. No puede ser así porque eso sería una utopía. Yo que soy utópico, y considero que la utopía se alcanza día a día, pasa en este proceso electoral por ir afianzando nuestros resultados electorales. Es decir que los ciudadanos de Castilla y León vean que sin tener diputados y senadores de aquí hemos trabajado y llevado los problemas de esta Comunidad con más fuerza que otros que se han olvidado que han sido elegidos por esta Comunidad. Asimismo que tengan en cuenta el trabajo que se realiza en las Cortes y en los diferentes ayuntamientos: un trabajo en defensa de los que más sufren, de la clase trabajadora, de aquellas familias y personas que han sido empujadas hacia una bolsa de marginalidad y del derecho al empleo, la educación, la salud, la vivienda y a la vida digna.

Entonces se creen y dan validez a las encuestas publicadas, que no otorgan a IU representantes en las provincias de Castilla y León y una caída de escaños en el ámbito estatal

Siempre digo de las encuestas que tienen una virtualidad para nosotros: si son muy positivas nos obligan a seguir trabajando para que sea más positivas y si no son todo lo positivas que debieran ser tenemos que seguir trabajando y avanzar en el proceso de la campaña. Lo que sí digo es que con un 40 por ciento de indecisos quiere decir que hay trabajo suficiente para seguir creciendo en Castilla y León. Si fueramos capaces de convencer a ese 40 por ciento de indecisos, estaríamos hablando de la fuerza mayoritaria en nuestra Comunidad.

¿Qué se juega IU-Unidad Popular en estas elecciones en España?

Izquierda Unida como tal no se juega nada. Quien realmente se lo juega es este país, si renuncia a hacer un nuevo país por la vía de un proceso constituyente nuevo, de que los que más tienen más paguen, si esto no va a ser posible, entonces IU no es quien pierde las elecciones, quien pierde las elecciones serán los ciudadanos y ciudadanas que en este país están siendo avasallados por el poder económico. En un país y en una Comunidad en que ha aumentado la bolsa de la marginalidad mientras se ha incrementado el poder económico de los que más tienen, estaríamos ante la pérdida de esa parte de la ciudadanía. Si en la noche del 20 los resultados, que no creo que sean los reales, son los que auguran las encuestas, mi gran preocupación no va a ser por IU, mi gran preocupación como coordinador va a ser por los ciudadanos y ciudadanas, por la clase trabajadora y por los que han perdido sus derechos, porque seguirán siendo los sufridores de una política al servicio de los intereses de los que más tienen.

¿Lamentan, sienten o creen que les perjudica no haber ido en coalición con Podemos?

De lamentarlo alguien será aquellos que no han querido hacer coalición con IU y que han renunciado a la posibilidad real de que mediante la suma se multiplicasen los resultados. Nosotros hemos trabajado hasta el último segundo para conseguir eso. No ha sido posible, pues ahora trabajamos con claridad desde la izquierda para defender nuestro discurso, en el que entendemos que está la política que necesita la mayoría de este país. Sí ellos han renunciado a hacer una política de izquierda, nosotros no tenemos porque entrar en depresión.

¿Pero la desunión de la izquierda no cree que beneficia al Partido Popular?

El que haya una parte de la ciudadanía que entienda que aparte de IU hay otros que puedan hacer política de izquierda, si beneficiaría al PP. Si en el tiempo que queda los ciudadanos y ciudadanas escuchan realmente lo que se dice por cada fuerza política no debería beneficiar al Partido Popular.

¿Qué medida o propuesta del programa diría que identifica a IU respecto de las otras fuerzas políticas que concurren a estas elecciones?

Hay muchos elementos diferenciadores. Más que uno, yo destacaría algunos. En primer lugar la apuesta clara en defensa de la clase trabajadora a través de la elevación del salario mínimo, del establecimiento del trabajo garantizado y de una más justa recaudación fiscal para conseguir esa justicia social. Eso no lo plantea nadie en este país. Luego, lo que llamamos proceso constituyente. Es decir que la Constitución nacida en el 78 ha roto ya sus costuras en el sentido de que el país ha crecido y evolucionado en el sentido de que no cabe en esa Constitución y nosotros apostamos no por una pequeña reforma que ponga adjetivos calificativos dentro de esa Constitución, sino por avanzar en una Constitución donde los derechos sociales, económicos y libertades sean reales y no sólo un mero título.

Pero ya entienden los ciudadanos lo que quieren decir con proceso constituyente, ¿no puede sonar rimbombante e incluso radical?

Nosotros entendemos que no tiene que sonar ni rimbombante ni radical. Lo que no queremos es engañar a nadie hablando de reformas que no sean capaces de eliminar el artículo 135 de la Constitución, que con nocturnidad y alevosía pusieron en marcha el PSOE y el PP, y que de ahí derivan medidas sociales y económicas que atentan a la dignidad de las personas.

Parece que no habrá una mayoría absoluta y que se deberá pactos, ¿cuáles se pueden vislumbrar, PP y Ciudadanos o el bloque de izquierda que gobierna en algunas comunidades y ayuntamientos?

A día de hoy sigo sin trabajar como mago con una bola mágica delante, con lo cual no voy a hacer profecías; lo que voy a hacer, igual que mi organización política, es trabajar con fuerza durante esta semana de campaña electoral para intentar convencer a la ciudadanía de la necesidad de una política diferente y de unas políticas alternativas como las que plantea desde la izquierda IU-Unidad Popular.

¿Cuál será el principal reto para el país a partir del 20 de diciembre?

El principal reto para el país no va a ser a partir del 20 de diciembre. El principal reto para el país está siendo en estos momentos: es tomar decisiones para cambiar esas políticas y evitar que quien mantiene las cadenas en su mano siga manteniendo las cadenas y los collares a quien tiene ese collar. Es decir que el gran poder económico de este país y mundial no sea el que siga marcando las pautas de qué es lo que hay que hacer aquí. Nosotros no queremos que desde el poder político se diga lo que dice el poder económico, aquello de que hay que rebajar salarios, elevar la edad de jubilación, de que no es posible que haya más pensionistas, de que hay un problema demográfico.

¿Como ve y qué campaña está haciendo el candidato Alberto Garzón?

Es una campaña potente de respuesta. Así ocurrió el primer día de campaña en Burgos, después en Avilés, en Cádiz, en Alicante y así permanentemente. Es decir, una respuesta de la población. Le veo con potencia y cuando le escucho, en los pocos debates en que participa y a los que no se dignan a ir otros candidatos a la Presidencia, considero que Alberto Garzón es el presidente que necesita este país.